British Petroleum (BP) tras el derrame de Deepwater Horizon Esta historia, como casi todas las que tienen final feliz, comienza con una tragedia. El desastre de Deepwater Horizon, ocurrido en 2010, fue uno de los derrames petroleros más grandes y devastadores en la historia. Algunos de los daños persisten hasta día de hoy, y estos son solo de los que somos conscientes, tal fue la magnitud del desastre. Este evento catastrófico obligó a BP a realizar un exhaustivo replanteamiento de sus políticas y prácticas de seguridad.
BP inició un programa de varios años para fortalecer sus estándares de seguridad, que incluía la mejora de la tecnología de seguridad, la intensificación de la formación en seguridad para todos los empleados, y una revisión de sus procesos operativos para integrar la gestión de riesgos de manera más efectiva. Un ejemplo específico de estas iniciativas fue la implementación de sistemas de control de pozos de última generación que proporcionan mejores capacidades de prevención y respuesta ante derrames. La empresa reconoció no solo los fallos técnicos, sino tambien los fallos humanos y busco asegurar tanto la capacidad de sus trabajadores como su salud.
Las reformas de BP han llevado a una reducción significativa en el número de incidentes graves en sus operaciones globales. Aunque el camino hacia la recuperación de su reputación ha sido largo, estas medidas han ayudado a restablecer la confianza del público y de los stakeholders en la compañía.
L’Oréal L’Oréal, el gigante de la cosmética, ha tomado medidas proactivas para garantizar la seguridad y el bienestar de sus empleados, integrando la seguridad en cada aspecto de sus operaciones. En el año 2021, recibió 14 reconocimientos destacados de la Real Sociedad para la Prevención de Accidentes (ROSPA) en américa latina por su liderazgo en salud y seguridad laboral.
La compañía ha implementado una amplia gama de programas que abarcan desde la ergonomía en el lugar de trabajo hasta la salud mental. Lo más destacable es su programa de bienestar ‘Share & Care’, que ofrece a los empleados acceso a servicios de salud, apoyo psicosocial y condiciones de trabajo flexibles . Además, L’Oréal ha puesto un gran énfasis en la formación regular y las auditorías de seguridad para identificar y mitigar riesgos potenciales de manera proactiva.
Estos esfuerzos han culminado en una disminución notable de incidentes y accidentes laborales y han establecido a L’Oréal como un líder en prácticas laborales éticas y seguras en la industria de la cosmética.
Alcoa, la historia de Paul O’Neill El primer discurso como CEO de Alcoa que dio Paul O’Neill no fue exitoso en muchos sentidos, pero demostró que el empresario estaba luchando la guerra correcta aunque sus accionistas no lo viesen así. Las primeras palabras del discurso marcarían un antes y un después en la relevancia que el mundo entero le daba a la seguridad laboral:
«Quiero convertir Alcoa en la compañía más segura en América. Quiero llegar a cero heridas»
Paul O’Neill
Cuando Paul O’Neill tomó las riendas de Alcoa en 1987, puso la seguridad de los trabajadores como su máxima prioridad, un enfoque inusual para un CEO recién nombrado enfocado en cuestiones financieras. Este enfoque radical y centrado en la seguridad fue inicialmente recibido con escepticismo por los inversores, pero O’Neill estaba convencido de que la mejora en la seguridad llevaría a una mayor eficiencia operativa y rentabilidad.
O’Neill implementó un sistema donde cada incidente de seguridad debía reportarse directamente a él en 24 horas, y los gerentes debían proporcionar un plan detallado para prevenir incidentes. Esta política no solo mostró el compromiso de la alta dirección con la seguridad, sino que también ayudó a fomentar una cultura de transparencia y responsabilidad. Se instaló una línea directa para que los empleados reportaran condiciones inseguras a la oficina del CEO, lo que empoderó a todos los niveles de la organización a participar en la mejora de la seguridad.
Como resultado de estas medidas, Alcoa no solo redujo su tasa de lesiones a una fracción de la media nacional en la industria del aluminio, sino que también mejoró su rendimiento financiero. Durante la década de 1990, Alcoa experimentó un crecimiento significativo y sus ingresos se multiplicaron. Este caso destaca cómo la inversión en seguridad puede generar retornos económicos, además de proteger a los empleados.
John Deere, un gigante en la fabricación de maquinaria agrícola y de construcción, ha establecido un referente en la industria por su enfoque proactivo y continuo hacia la seguridad en el trabajo. Reconociendo los riesgos inherentes a la operación de maquinaria pesada, John Deere ha desarrollado un programa de seguridad integral que no solo protege a sus empleados, sino que también extiende sus estándares de seguridad a sus clientes y distribuidores.
La estrategia de seguridad de John Deere incluye una combinación de formación rigurosa, innovaciones tecnológicas y un compromiso cultural con la seguridad que permea toda la organización. Por ejemplo, la compañía ha implementado programas de formación en realidad virtual para que los operadores experimenten situaciones de riesgo en un entorno controlado y aprendan a manejarlas de manera segura antes de operar maquinaria real. Además, han introducido sistemas avanzados de monitoreo de maquinaria que alertan a los operadores sobre posibles fallos mecánicos o errores de manejo en tiempo real.
Estas iniciativas han resultado en una tasa de accidentes notablemente baja tanto en sus instalaciones de fabricación como en los sitios de operación de maquinaria por parte de clientes. John Deere no solo ha recibido múltiples premios por su excelencia en seguridad, sino que también ha mejorado la lealtad y satisfacción del cliente, al asegurar que los productos que venden sean seguros y confiables. Además, su enfoque en la innovación y la seguridad ha ayudado a posicionar a la compañía como líder en el mercado de maquinaria pesada.
La historia de John Deere demuestra que la inversión en seguridad es fundamental para proteger no solo a los empleados, sino también a los clientes y la reputación de la marca. John creó un entorno de trabajo seguro y productivo, a través de la educación, tecnología y un enfoque corporativo en seguridad, destacando cómo la prevención de riesgos laborales puede integrarse exitosamente en la estrategia de una empresa.
Toyota Toyota es renombrada por su eficiencia y alta calidad de producción, lograda a través de su innovador Sistema de Producción Toyota. Este sistema no solo se centra en la calidad y eficiencia, sino también en la seguridad de los empleados.
El sistema ‘andon’, que permite a cualquier empleado detener la producción si percibe un problema de seguridad, es un ejemplo clave de cómo Toyota empodera a sus trabajadores para tomar medidas proactivas hacia su propia seguridad y la de sus compañeros. Esto ha creado un ambiente donde la seguridad y la eficiencia son responsabilidad de todos.
Además de empoderar a sus empleados, Toyota lleva a cabo auditorías de seguridad regulares y capacitaciones continuas para garantizar que los estándares de seguridad se mantengan en todos los niveles de la empresa. Estas capacitaciones no solo cubren procedimientos operativos estándar, sino que también fomentan una cultura de mejora continua, donde los empleados son alentados a proponer nuevas ideas para mejorar la seguridad. Por ejemplo, Toyota ha implementado mejoras tecnológicas como robots colaborativos que trabajan junto a humanos en tareas que presentan riesgos de seguridad, reduciendo así la posibilidad de lesiones.
Este enfoque ha llevado a Toyota a mantener una de las tasas más bajas de incidentes en la industria automotriz, al mismo tiempo que sostiene altos estándares de calidad y producción.
Estas leyendas de la prevención ilustran cómo la prevención de riesgos laborales efectiva no sólo protege físicamente a los empleados, sino que también fortalece la cultura organizacional, mejora la eficiencia operativa y promueve una imagen corporativa responsable. El compromiso con la seguridad es una inversión que produce beneficios tangibles e intangibles, demostrando que cuando las empresas priorizan el bienestar de sus trabajadores, el éxito general es inevitable.
Desde CTAIMA invitamos a todos los lectores a que investiguen en mayor profundidad cada uno de estos casos. Es nuestra esperanza que tanto contratistas como trabajadores puedan verse inspirados por estas historias y los impulse a tomar más iniciativas que puedan asegurar la salud y seguridad de todos y cada uno de los miembros de una empresa.
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